La dinámica
del presente
POR: HERNAN
SIBAJA
Hoy en día, vivimos en un contexto muy dinámico;
levantarnos muy temprano, ir al trabajo y hacer un sinnúmero de actividades;
sentimos que el día es demasiado corto y que necesariamente debemos usar horas
nocturnas para complementar cada actividad de nuestras vidas.
En algunas circunstancias como éstas, generalmente
vamos adoptando la tendencia a resolver cualquier tarea, problema o dificultad
de la manera más corta, rápida y eficiente. Ciertamente estamos obligados a ser
personas con una capacidad multitareas, como consecuencias aprendemos a tomar
el estrés como algo tan común.
Si bien es cierto, hay quienes no pueden con este
estilo de vida, que dicen ser partidarios de la tranquilidad, que el estrés los
deteriora. Toda persona desearía la serenidad de la vida, pero lo cierto es: si
uno se detiene, si se pierde el ritmo; podríamos sentirnos no adaptados a estas
circunstancias, tirar la toalla y abandonar nuestras convicciones, propósitos,
prospectos, empresa o actividad importante alguna.
Cada logro genera un nuevo compromiso, una nueva
responsabilidad. La dinámica del presente, nos permite mantener nuestras mentes
siempre activas, a tener o
crear nuevos retos. Si me detengo no soy
productivo. Es un ciclo de vida, haces algo produces algo, solucionas
algo encuentras otro nuevo asunto a resolver. Aburrimiento es un concepto
desconocido en este contexto.
Se ha dicho que la ociosidad es el origen de todos
los vicios, hoy en día esto no aplica para todos, solo para aquellos que aún no
han encontrado un lugar en la dinámica del presente.
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